Kalan abre con una mezcla pimienta negra y especias con notas frescas de naranja sanguina, la pimienta negra y las especias de la apertura se mezclan y surgen como especias con un toque de madera y tierra. Posteriormente en el corazón de la fragancia las notas de azahar y lavanda resaltan. Finalmente, en el secado las notas de sándalo blanco, amaderadas y ámbar proyectan una nota blanca y suave como madera con un toque cremoso.
Inspirada en los jardines de Versalles, Kalan captura ese hermoso equilibrio a través de dos notas esencialmente francesas: flor de naranjo y lavanda, evocando con esto el impresionante esplendor de dichos jardines. Una síntesis perfecta de elegancia y majestuosidad. Un hombre contemporáneo, de otro tiempo. En él, la contradicción se convierte en un lujo, su privilegio. El perfume de este esteta del siglo XXI fluctúa entre la sombra y la luz. Tampoco se ajusta a las tendencias actuales. Su atuendo brilla de un rojo ardiente. Su lujo es cautivador. El que lo pueda domar será libre.
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